Yo era adicto a la heroína. Dejarla fue el mayor desafío de mi vida: noches vacías, promesas rotas y pasos torpes hacia algo parecido a la esperanza. La recuperación no es lineal: terapeutas, grupos, recaídas… Pero también hay pequeños logros que te mantienen vivo. Un día encontré este juego y, curiosamente, se convirtió en mi nueva adicción. Rutinas, desafíos, foros, risas y un sentido de propósito digital. No sustituye nada. Ahora paso horas farmeando niveles, cumpliendo misiones y sintiéndome, de algún modo, libre, pero preso de este algo que me hace ir a dormir tarde, que me despierta sudando en mitad de la noche...
Yo era adicto a la heroína. Dejarla fue el mayor desafío de mi vida: noches vacías, promesas rotas y pasos torpes hacia algo parecido a la esperanza. La recuperación no es lineal: terapeutas, grupos, recaídas… Pero también hay pequeños logros que te mantienen vivo. Un día encontré este juego y, curiosamente, se convirtió en mi nueva adicción. Rutinas, desafíos, foros, risas y un sentido de propósito digital. No sustituye nada. Ahora paso horas farmeando niveles, cumpliendo misiones y sintiéndome, de algún modo, libre, pero preso de este algo que me hace ir a dormir tarde, que me despierta sudando en mitad de la noche...
En este juego verás muchas bolas y algunos pitos, de ahí su nombre.
Frenético de pelotas
Si no lo tienes claro no te preocupes, ya lo he jugado yo por ti: https://youtu.be/nkpU0HOSHkE
Uno de los indies más divertidos del año. Un roguelite sin muchas pretensiones que mezcla Arkanoid/Breakout con builds de items que rompen bastante la partida, y gestión de base entre runs donde vas mejorando a tus personajes y que lo convierten en un videojuego más recomendable para cualquier tipo de jugador. ¿Resultado? Les ha salido cocaína.
Cada partida dura unos 15 minutos. SOLO 15 MINUTOS. Suena inofensivo, ¿verdad?
NOTA: Este juego debería estar prohibido por la Convención de Ginebra.
Llevo años en el mercado laboral pagando la sanidad para tener un sistema de calidad, el problema es que soy español y como saben esto está fatal, así que me fui a la privada, pero me rechazaron... Me dijeron que la enfermedad que provoca BALL X PIT es una adicción crónica que no tiene ni cura ni tratamiento, me dijeron que me lo pasase con todos los logros y que cuando no quedase nada por conseguir a lo mejor podía volver a tener algo de vida social, y empezar a remontar por ahí. El que me atendió, desde que le dije la enfermedad tan grande que es BALL X PIT se puso mascarilla y se limpió las manos por si le podía pegar algo.
Total, que estoy jodido. AYUDA.
Es un juego de 10, de esos que en cuanto te agarra no te suelta. No te habrás dado cuenta y ya llevarás 10 horas jugadas y querrás más. Si no tienes vida social, o no temes perderla, dale una oportunidad, de nada.
El juego no esta bien optimizado. Parece una beta... crashea con frecuencia y despues de unos minutos/horas se vuelve completamente repetitivo. Es entretenido si buscas pasar una unica tarde. Relacion calidad precio, no lo compraria
Lo compré despues de leer a la gente que es adictivo y luego le metí 3 horas sin darme cuenta sin haber desayunado. Peligrosamente adictivo, recomiendo evitarlo.
Básicamente bolas y pit-0, pero versión PG-13. Entro por diversión y salgo emocionalmente confundida… ¿Cuenta como infidelidad?
Ahora bien,
Si te van los roguelikes, los juegos de echarle horas sin saber cómo ni por qué, y ese bucle infernal de “venga, una más y me voy” que se convierte en “mierda, han pasado tres horas”, este sitio es para ti.
No hay reglas. No hay objetivos. Solo bolas, luces, caos y una energía colectiva que grita “¿por qué me estoy divirtiendo tanto con esto?”. Te lanzas al pozo (el pit, guiño guiño), y cuando te das cuenta estás sudando y gritando.
Ideal para gente con ansiedad, exceso de energía o trauma sin resolver. También para fans de lo absurdo, lo sensorial y lo ligeramente humillante.
100% recomendado si te mola perder el control, el sentido del tiempo… y un poco la dignidad
Yo era adicto a la heroína. Dejarla fue el mayor desafío de mi vida: noches vacías, promesas rotas y pasos torpes hacia algo parecido a la esperanza. La recuperación no es lineal: terapeutas, grupos, recaídas… Pero también hay pequeños logros que te mantienen vivo. Un día encontré este juego y, curiosamente, se convirtió en mi nueva adicción. Rutinas, desafíos, foros, risas y un sentido de propósito digital. No sustituye nada. Ahora paso horas farmeando niveles, cumpliendo misiones y sintiéndome, de algún modo, libre, pero preso de este algo que me hace ir a dormir tarde, que me despierta sudando en mitad de la noche...
Yo era adicto a la heroína. Dejarla fue el mayor desafío de mi vida: noches vacías, promesas rotas y pasos torpes hacia algo parecido a la esperanza. La recuperación no es lineal: terapeutas, grupos, recaídas… Pero también hay pequeños logros que te mantienen vivo. Un día encontré este juego y, curiosamente, se convirtió en mi nueva adicción. Rutinas, desafíos, foros, risas y un sentido de propósito digital. No sustituye nada. Ahora paso horas farmeando niveles, cumpliendo misiones y sintiéndome, de algún modo, libre, pero preso de este algo que me hace ir a dormir tarde, que me despierta sudando en mitad de la noche...
En este juego verás muchas bolas y algunos pitos, de ahí su nombre.
Frenético de pelotas
Si no lo tienes claro no te preocupes, ya lo he jugado yo por ti: https://youtu.be/nkpU0HOSHkE
Uno de los indies más divertidos del año. Un roguelite sin muchas pretensiones que mezcla Arkanoid/Breakout con builds de items que rompen bastante la partida, y gestión de base entre runs donde vas mejorando a tus personajes y que lo convierten en un videojuego más recomendable para cualquier tipo de jugador. ¿Resultado? Les ha salido cocaína.
Cada partida dura unos 15 minutos. SOLO 15 MINUTOS. Suena inofensivo, ¿verdad?
NOTA: Este juego debería estar prohibido por la Convención de Ginebra.
Llevo años en el mercado laboral pagando la sanidad para tener un sistema de calidad, el problema es que soy español y como saben esto está fatal, así que me fui a la privada, pero me rechazaron... Me dijeron que la enfermedad que provoca BALL X PIT es una adicción crónica que no tiene ni cura ni tratamiento, me dijeron que me lo pasase con todos los logros y que cuando no quedase nada por conseguir a lo mejor podía volver a tener algo de vida social, y empezar a remontar por ahí. El que me atendió, desde que le dije la enfermedad tan grande que es BALL X PIT se puso mascarilla y se limpió las manos por si le podía pegar algo.
Total, que estoy jodido. AYUDA.
Es un juego de 10, de esos que en cuanto te agarra no te suelta. No te habrás dado cuenta y ya llevarás 10 horas jugadas y querrás más. Si no tienes vida social, o no temes perderla, dale una oportunidad, de nada.
El juego no esta bien optimizado. Parece una beta... crashea con frecuencia y despues de unos minutos/horas se vuelve completamente repetitivo. Es entretenido si buscas pasar una unica tarde. Relacion calidad precio, no lo compraria
Lo compré despues de leer a la gente que es adictivo y luego le metí 3 horas sin darme cuenta sin haber desayunado. Peligrosamente adictivo, recomiendo evitarlo.
Básicamente bolas y pit-0, pero versión PG-13. Entro por diversión y salgo emocionalmente confundida… ¿Cuenta como infidelidad?
Ahora bien,
Si te van los roguelikes, los juegos de echarle horas sin saber cómo ni por qué, y ese bucle infernal de “venga, una más y me voy” que se convierte en “mierda, han pasado tres horas”, este sitio es para ti.
No hay reglas. No hay objetivos. Solo bolas, luces, caos y una energía colectiva que grita “¿por qué me estoy divirtiendo tanto con esto?”. Te lanzas al pozo (el pit, guiño guiño), y cuando te das cuenta estás sudando y gritando.
Ideal para gente con ansiedad, exceso de energía o trauma sin resolver. También para fans de lo absurdo, lo sensorial y lo ligeramente humillante.
100% recomendado si te mola perder el control, el sentido del tiempo… y un poco la dignidad
